¡YA VIENEN LOS REYES MAGOS (AHORA SÍ QUE SÍ)!
Una de las cosas que más nos gusta cuando llega esta época del año es compartirla contigo. Ahora es el momento de confesar que te ilusiona tanto como a nosotros volver a casa acompañado de las luces encendidas de las calles, quedarte embobado con los turrones que ya se exhiben en las pastelerías, contar los días para reunirte con tu familia y escribir la carta de los Reyes Magos, por mucho que ya no seas un niño. ¿Sabías que en Menkes ya la hemos enviado?
Además, no solo las casas se llenan de magia. También los ayuntamientos empiezan a preparar la Cabalgata de Reyes Magos para recibirlos como se merecen. Un año después, volveremos a reencontrarnos con ellos, que ya están deseando recorrer las calles de cada pueblo y colarse en nuestros hogares para dejarlas llenos de regalos.
¿Y por qué sabemos que tienen tantas ganas? Eso es, precisamente, lo que hoy queríamos contarte.
Hace unos días, recibimos una llamada en nuestro taller. No os imagináis nuestra cara de sorpresa cuando escuchamos sus voces. Eran ellos: Melchor, Gaspar y Baltasar.
SS. MM. los Reyes Magos de Oriente nos preguntaron cómo nos habíamos portado este año y qué habíamos pedido. También nos explicaron cuál iba a ser su recorrido y… es ahora cuando viene lo que más ilusión nos hizo: ¡nos contaron que escogerían su traje y todos los complementos en Menkes!
Desde ese momento, no se nos ha borrado la sonrisa y estamos trabajando día a día para llegar a tiempo y ofrecerles el mejor vestuario. En esa misma llamada, también nos pidieron que ayudásemos a todos aquellos ayuntamientos que van a organizar una Cabalgata de Reyes. Nuestra respuesta fue un sí rotundo, y es que en Menkes disponemos de una gran variedad de trajes para conseguir que en cada pueblo, puedan lucir sus mejores galas. ¿Quieres saber cómo son?
MELCHOR Y LA CORONA
Su nombre proviene del hebreo donde malkî y ôr significa “mi rey es luz” o “rey de la luz”. Él, desde Europa, y con su barba blanca, entrega la mirra, al niño Jesús. El traje del Rey Melchor suele estar compuesto por una doble capa para protegerse del frío, pantalones anchos y cómodos y una túnica real. Nunca se separa de su corona real y el cinturón o fajín que completan su estilismo. En cuestión de tonos, sus favoritos son los azules, blancos y plateados.
GASPAR Y EL INCIENSO
Los accesorios también son importantes porque terminan de definir el estilo de cada rey. A Gaspar, por ejemplo, no le puede faltar su incienso que es, precisamente, su regalo para el niño Jesús. Su nombre proviene de la palabra persa kansbar, que significa administrador del tesoro. Con su barba y pelo rubio, el traje de Gaspar está compuesto por una capa, una túnica con cinturón para ceñirla y una corona real.
BALTASAR Y SU TURBANTE
Procedente de África, Baltasar es el encargado de entregar el oro en el nacimiento de Jesús. Su traje es de lo más peculiar pues no faltan los colores y motivos étnicos propios de culturas africanas. También suele llevar un turbante que lo distingue de Melchor y Gaspar.
TRAJES DE PAJE REAL
Sus Majestades no vendrán a visitarnos solos, por eso también quieren que tengamos a punto los trajes de pajes reales. Ellos son sus mejores aliados para que el día 6, todas las casas se despierten llenas de sonrisas. En Menkes también podréis encontrar las prendas necesarias.
TRAJES DE LA COMITIVA REAL
Si este año deciden venir acompañados de una comitiva real, solo tendrán que decirnos antes qué trajes quieren para cada uno de los asistentes.
También sabemos que algunos ayuntamientos quieren sorprender a los Reyes Magos y hacer sus propias carrozas temáticas. En ese caso, podéis contar con nosotros. No les desvelaremos el secreto y así ellos mismos se quedarán sin palabras cuando vean a los protagonistas de la Brigada Canina, Bob Esponja o Pokemon, por ejemplo, celebrando su llegada. Gracias a nuestros talleres de confección artesanal damos vida a cualquier personaje que pueda ser imaginado para que no se pierda esta cabalgata, tanto los trajes como los complementos en pelucas y maquillaje.
Así, recibiremos a los Reyes Magos con los brazos (y el corazón) abiertos. Porque una Navidad más,
seguimos creando sueños para que no dejes de creer en ellos.